jueves, 17 de marzo de 2016

CON SOLO CRUZAR LA MIRADA

Aquí os dejo mi entrada de hoy un micro relato que espero que sea de vuestro agrado. Feliz jueves.

CON SOLO CRUZAR LA MIRADA

Ana paseaba como cada tarde, pero aquél no fue un paseo corriente, en esta ocasión se quedó mirando a un chico que paso junto a ella y que tenía los ojos azules más bonitos que había visto nunca. Curiosamente, él también se quedó mirándola, ya que la joven tenía unos ojos verdes que también llamaron su atención, de modo que se volvió y le dijo si querría tomar un café con él. Ella le dijo muy tímidamente y con mucha educación que no solía hablar con desconocidos y mucho menos quedar con ellos. Sin embargo, cuando los dos ya habían emprendido el camino, Ana se reconcomía por dentro: quizás mereciera la pena darle una oportunidad y jamás había visto unos ojos tan lindos, de modo que fue en su busca y le preguntó si seguía en pie la invitación. El joven le dijo que por supuesto y así, con la excusa de una mirada y un café con un desconocido, comenzó  una preciosa amistad.


TERESA
MARZO 2016


3 comentarios:

  1. Lo que puede surgir de una sola mirada!!! Muy condensado tu relato, y repleto de esperanza, me encantó.
    Un beso enorme, Tere.

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  2. Ayyyy qué bonito, es que no hay quien se resista a unos ojos verdes, te lo digo yo.
    Y ella fue muy lista al recapacitar.
    Un besito.

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  3. Pues, a pesar de su timidez innata, la chica tuvo el coraje y acierto de retomar la iniciativa e ir tras él. Espero que ese encuentro no solo fuera el principio de una bella amistad sino también de un gran amor.
    Un abrazo.

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