Esta mañana para despertarnos, mi marido a puesto música relajante, jeje, bueno yo oía un sonido a lo lejos, porque realmente hasta que no me he puesto mi audifono no oía nada, pero nada, y muchas noches sinceramente la echo de menos, porque me facilitaría el dormirme, ahora con los acufenos dichosos me cuesta horrores, y eso me ayudaría pero claro como me apago, jeje, parezco un robot, jeje., no puedo hacer uso de la tecnología y claro imposible.
Esto me ha llevado a pensar que en ciertos tipos de intervenciones y pruebas médicas en las cuales nos da un poco de inseguridad y miedo podrían poner música relajante o clásica así te relajas y pierdes un poco el miedo o la inseguridad que conlleva ciertas pruebas médicas, lo haría todo mucho mas fácil y no tendríamos tanta inseguridad y miedo, a parte de que, si hay médicos muy humanos que te apoyan y te animan, que no digo que no, pero la música esta comprobado todos los sabéis bien, que cambia nuestro ánimo, aparte de que amansa a las fieras, jeje, de modo que sería fantástico que en todos los quirófanos y en ciertas pruebas como complemento a los tranquilizantes que te administran y los ánimos que te infunden, pusieran música eso haría todo mucho pero mucho más fácil.
http://musicaenvena.com/que-es/
Por lo visto, no es que estuviera descubriendo nada, pero por lo visto es algo que los madrileños sobre todo ya pueden disfrutar en distintos hospitales, es maravilloso, y creo que sin equivocarme debería de hacerse en todos los hospitales españoles pero por lo que veo solo se hace en las dos grandes capitales de nuestro país, Madrid y Barcelona, y parece ser que recientemente también en Valencia, en fin, poco a poco, espero que la medicina, busque mas beneficios que hagan que los pacientes se sientan mejor y puedan hacer frente de una manera mas relajada y positiva a la enfermedad y lo que conlleva la estancia en un hospital que no es nada pero nada fácil, ni para ellos y por supuesto los familiares, ya que el ver con mejor ánimo también ayudan a los que acompañan.
TERESA
MAYO 2019
Hola.
ResponderEliminarEstoy absolutamente de acuerdo.
Hace años mi hija estuvo ingresada en el hospital por una mononucleosis y sus amigos fueron a visitarla con las guitarras(estaba en habitación individual y pedimos permiso) y con la música se animó muchísimo. Soy fan de la música par atodo, es mágica.
Muy feliz domingo.
Hola Gemma:
EliminarYo también estoy convencida de que la música tiene un punto de magía.
Y me alegro que durante la estancia de tu hija en el hospital se le hiciera mas llevadera gracias a sus amigos con la guitarra, y por supuesto que el centro hospitalario os diera permiso para ello.
Yo no solo pienso en la gente joven si no en la gente mayor que quizás sea la mas vulnerable a la hora de estar en un hospital.
Feliz tarde noche del domingo. y buena semana.
Besos.
Tienes toda a razón, Tere. La música no solo amansa a las fieras sino que también tranquiliza y hace más soportable una situación estresante.
ResponderEliminarCuando me tuvieron que practicar una resonancia mangnética, esa prueba en la que te ponen dentro de un tubo estrecho durante más de media hora, que te da claustrofobia, la enfermera me dio unos auriculares. Yo creía que sería para escuchar música mientras duraba la prueba, pero no, eran simplemente para que no oyera tanto el ruidoso funcionameinto del aparatado que, sin esos auriculares, resultaría ensordecedor. Una pena, jeje.
Un abrazo.
jo que desengaño, porque estar ahí metido, la verdad agobia un montón, en fin, hubiera sido mejor ponerle música que pena, que le vamos a hacer, pero bueno al menos el ruido fue menos ruido.
EliminarUn abrazo
De verdad que sí, a mi pasa algo curioso. La música relajante, la clásica, la coral, etc... me despiertan, me dan un chute de vida; en cambio, la discotequera y bacaloide me produce un sueño infinito, como si el ruido me hiciera desconectar. Un abrazo
ResponderEliminarVaya que curioso, ves a mi la música clásica me duermo uf, no te puedes imaginar, mi padre ponía en el coche cuando íbamos de viaje, música clásica y no veas las siestas que me pegaba hasta casi llegar a destino.
EliminarUn abrazo